Una fragancia que sorprende con el equilibrio ideal entre femenina y adictiva. Los frutos rojos aportan la vitalidad al aroma, para luego poder sentir un vibrante ramo floral en el corazon. Los cristales de fondo resaltan el brillo del elixir.
Fragancia con personalidad vibrante y autentica.
Pomelo, bergamota y lavanda explotan con pimienta negra, salvia y nuez moscada.
Ambar, patchouli y vetiver, revelan un final fuerte y seductor.
Fragancia romática amaderada para un hombre elegante de espíritu libre.
Cítricos, fougère, vetiver, nuez moscada y patchouli se funden con maderas de cedro y sándalo.
Fragancia con personalidad vibrante y autentica.
Pomelo, bergamota y lavanda explotan con pimienta negra, salvia y nuez moscada.
Ambar, patchouli y vetiver, revelan un final fuerte y seductor.
Fragancia romática amaderada para un hombre elegante de espíritu libre.
Cítricos, fougère, vetiver, nuez moscada y patchouli se funden con maderas de cedro y sándalo.
Las esencias se entrelazan en armonía para crear una exquisita fragancia floriental frutada.
Notas de violeta, gardenia y flor de azahar.
Maderas de cedro, vetiver y vainilla, juegan con la frescura de los cítricos, cassis, frambuesa y ciruela.
Shampoo Tío Nacho Herbolaria Milenaria, con jalea real, ortiga y extractos anti caída de origen natural que ayudan a dejar tu pelo visiblemente más fuerte, resistente y protegido.
Es un cuidado diario que impulsa el fortalecimiento de la fibra capilar.Ayuda a tener un pelo más largo, con brillo, suave y dócil todos los días.Tiene una fragancia fresca, con notas florales. Además, contiene filtros UV e ingredientes de origen natural, como la Jalea real y el Ylang Ylang.
Fragancia de espíritu audaz. Casis, bergamota y pimienta rosa, revelan una experiencia vibrante, junto a petit grain, ámbar y patchouli. Musgo de roble, hojas de abedul y almizcle, redondean un final único.
Fragancia de espíritu audaz. Casis, bergamota y pimienta rosa, revelan una experiencia vibrante, junto a petit grain, ámbar y patchouli. Musgo de roble, hojas de abedul y almizcle, redondean un final único.